El Hueco Relieve

Trabajando el cuero: el hueco relieve

Bien, mientras estoy a la espera de, bien conseguir materiales, bien conseguir herramientas, bien ponerle ganas al asunto, voy a hacer algo de trabajo en cuero para una futura pieza que aun no tengo muy concretada pero que posiblemente finalice en una bolsa de cuero para el cinto.

Entrando un poco mas en materia, lo que vamos a realizar es un "grabado" o "repujado" de una cacho de cuero de vaqueta. He puesto entrecomillas ambas palabras porque no es exactamente ninguna de la dos.

Para decorar cuero, hay múltiples técnicas conocidas y documentadas, y que podemos ver aquí. Pero la que voy a utilizar, no es ninguna de ellas. ¿Por qué? Bien, lo normal en estos casos sería repujar el cuero, pero la vaqueta (como muchos ya sabréis) es un cuero por lo general bastante grueso, y aunque se puede hacer, es bastante reticente a esta técnica.

El repujado implica poner el cuero sobre plastilina, y hundir (por la parte de la carne) con buriles, hasta conseguir la profundidad adecuada. Cuando le damos la vuelta, obtenemos un relieve estupendo. Como ya he dicho, la vaqueta es reticente a este relieve, por lo que tendremos que usar otra técnica, que podría ser bien el relieve (alto, medio o bajo) o el hueco relieve (que es la que yo voy a utilizar).

¿Que necesitamos?
  • Unos buriles serían de gran ayuda, pero si no podéis disponer de ellos, hay maneras de improvisarlos. Véase como hice yo mi primer escarceo en esta técnica, mediante un destornillador y un remache ciego de aluminio. Lo básico que yo voy a necesitar, son 2 buriles de pala (uno fino y otro gordo), uno de bola (por si acaso), y 2 de punta (una recta y otra curva) para diferentes perfilados.
  • Cuero. Obviamente, porque si no veo un poco difícil hacer nada. En este caso de vaqueta.
  • Tintes, en mi caso negro, para que resalte mas. Y también emplearé algo de betún de judea.
La técnica del hueco relieve, consiste en hacer un hundimiento del dibujo por la flor del cuero, trabajo que realizaremos con los buriles. Se denomina (artísticamente) hueco relieve, a los dibujos o figuras que están por debajo de la superficie de la pieza. Esto es muy común en los jeroglíficos egipcios, y se suele emplear para denominar trabajos en piedra.

Antes de nada, y de iros a por algo complicado, coged un cacho de cuero de la pila de "piezas defectuosas" y haced una pruebecitas con formas sencillas, probad acabados, técnicas de tintado ese tipo de cosas que después evitan cagadas mayores en la pieza que iba a ser definitiva.

Lo primero, como de costumbre, es saber que dibujo se va a hacer en el cuero. Claramente hay dos opciones, o buscar algo por internet que nos guste, o dibujarlo nosotros mismos. Yo busqué por internet, y me decanté por una silueta de dragón (que típico), entre las cuales me quedé con esta, aunque es un poco grande, me parece de una dificultad extrema, por lo que ganó muchos puntos.


¿Y ahora como trasladamos ese pedazo de dibujo tan guay al cuero? La opción mas lógica es quizá la mas estúpida, y es dibujarlo a mano. Ya os digo que lo descartéis a no ser que seáis unos cracks. La segunda opción, mucho mas fácil de realizar, es imprimir la silueta, poner el papel sobre el cuero, y repasar con un lápiz por encima de todos los bordes. Cuando levantemos el lápiz, tendremos la silueta en el cuero. La tercera opción (que es la mejor de todas) es imprimir la silueta, pero en vez de trasladarla directamente al cuero, es pasarla primero a papel cebolla, y después con el papel cebolla, traspasarlo al cuero.


¿Porqué este paso intermedio? Principalmente para evitar que si se nos mueve (por cualquier motivo) el papel (nos demos cuenta o no) poder rectificar la posición del mismo con seguridad, puesto que el folio blanco normal no transparenta y nunca sabemos a ciencia cierta si la cosa se ha movido o está bien puesto, y puede acabar siendo un desastre. Como alguno comenta por este mundillo, "te enseño mis errores para que los cometas tu".



Una vez el dibujo está en el cuero, lo remojamos muy bien, y preparamos un bol de agua y una esponjita para ir humedeciendo el cuero, que se secará a medida que trabajamos. Luego toca hundir material.


Primero perfilar con un buril de punta. Tened cuidado en este punto con bordes que estén cercanos. ¿Porqué? Principalmente, porque capa mas externa del cuero, aunque flexible, cuando hundes un punto, tiende a tirar de toda la piel que hay a su alrededor. Me ha quedado un poco mística la explicación, pero haber si con un dibujo lo explico algo mejor. En definitiva lo que pasa es que si hay 2 bordes hundido cerca, uno va a tirar del otro (denshundiéndose mutuamente) hasta que, con paciencia, estiremos la piel, y permita tener las 2 partes hundidas.


El dibujo representa a la izquierda, la piel antes hundir nada, y vemos como los cuadrantes están rectos, al hundir (en la parte de la derecha) la zona oscura, vemos que la lineas antes rectas, se curvan hacia la zona hundida. Como ya digo, la manera de evitar esto, es paciencia y repasando todos los borde cada poco tiempo.

Para hundir zonas mas bastas o presionar mas, usamos la pala, pequeña o grande según la situación, y en caso de grandes zonas ha hundir, la bola, alisando uniformemente con la pala grande (este no es mi caso, pues no hay grandes zonas a hundir). También se puede usar para perfilar (con zonas ya hundidas) el lateral de la pala pequeña.

Tras arduas horas de trabajo, objetemos algo como esto. Bueno igual como esto no, pero seguro que se asemeja al dibujo de que partimos.


Ahora hay que dejar secar la pieza. Una vez seca, procedemos a tintar las zonas hundidas (se podría hacer al revés o tintes a distintos colores, o incluso con betún de judea). Para tintar con precisión, ni pincelitos, ni esponjitas ni ostias. Que al final tintamos lo que no es y intentar limpiarlo con alcohol pero no queda bien, y enguarrinamos un trabajo que iba como la seda. Así que nos curamos en salud, cogemos el buril de punta, la mojamos en tinte y con paciencia lo tintamos todo. No es el método mas rápido (de echo casi lleva mas tiempo tintarlo que hacer el hueco relieve), pero el acabado es maravilloso. Yo, como observaríais en las imágenes, he ido tintando a medida que avanzaba. Me gusta ver que avanzo, mas que nada.





Finalmente me decante por envejecer un poco el cuero con betún de judea, y el acabado me gusta mucho. Luego procedemos a darle una pasadita de crema nivea para nutrir y proteger un poco todo el maravilloso trabajo que acabamos de hacer. No se que tal resultaría cocer un poco la pieza, a modo de protección del hueco relieve, al endurecer la superficie, es algo que tengo que probar con el retal de pruebas.


Si todo nos ha salido bien, tendremos un maravilloso dibujo en el cuero, que podremos utilizar para múltiples piezas. Espero que os sirva de ayuda a aquellos que no os atrevíais a hacerle perrerías al cuero.

Como comentario final, lo normal para hacer este mecanismo de decoración (hueco relieve) es usar el grabado, o lo que es lo mismo, retirar material mediante las herramientas adecuadas que yo no poseo.
 
El Rincón del cartón/ Blog

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